Andrea Esquivel, terapeuta respiratoria de Costa Rica, sumó a su centro una cámara hiperbárica para ayudar a sus pacientes a recuperarse de las secuelas post-Covid. 

Las secuelas producidas por el virus Sars-Cov pueden incluir desde complicaciones cardíacas o renales a problemas respiratorios a largo plazo.La Dra Andrea, directora de Terap, se especializa en  tratar pacientes con enfermedades agudas, crónicas o degenerativas que comprometan el sistema respiratorio. Luego de recibir varios pacientes con secuelas post-covid, decidió optar por la medicina hiperbárica para brindarles una terapia efectiva pero no invasiva.

El estrés oxidativo y la inflamación que produce la enfermedad por Covid 19 genera, entre otros síntomas, hipoxia, daño celular y mitocondrial. Diversos estudios demuestran que la terapia de oxigenación hiperbárica (TOHB) genera notables mejoras desde la primera sesión y produce un aumento en la generación de ATP a nivel mitocondrial, restaura el estrés oxidativo y reduce la inflamación. En casos de hipoxia pulmonar, se registró una disminución de la disnea, el dolor de pecho y una rápida corrección de la hipoxemia. La TOHB también suele indicarse mientras el paciente está transitando la enfermedad ya que, mejora notoriamente el cuadro clínico, evitando así la necesidad de respiración mecánica y reduciendo el riesgo de mortalidad. 

Esquivel nos compartió su experiencia con la cámara hiperbárica y destacó que: “ha sido increíble la evolución de los pacientes, no solamente tenemos pacientes post- covid-19 sino que actualmente vienen con muchas otras patologías como fibromialgia, parkinson,  migrañas, pie diabético o úlceras.Desde la primera sesión podemos notar su mejoría”. 

Recientemente recibió a una paciente con una herida post quirúrgica, producto de un cáncer colon, que no había cicatrizado, inclusive recibiendo curaciones regularmente.Se le indicaron 20 sesiones de cámara hiperbárica a 1,45 ATA y al finalizar el tratamiento la herida  quedó perfectamente cerrada. En dichos casos, la TOHB genera un aumento de colágeno y consecuentemente una reducción en los tiempos de cicatrización. Además, se reduce la inflamación, el edema y el dolor, se estimula la formación de nuevos vasos sanguíneos y se previenen infecciones.

La Dra Andrea, finalizó la entrevista expresando su alegría  por sumar la cámara hiperbárica a su práctica médica: “Me siento muy orgullosa de tener esta calidad de equipo en mi clínica y estoy segura que esto servirá de motivación a otros colegas”